top of page
  • Foto del escritorRamón

Vamos a la playa


Don Lorenzo

Parece que "Lorenzo" ha llegado para quedarse. Y ahora que nos "sueltan" (aunque aún tenemos que tener cuidado y respetar las normas para cuidarnos la salud) y salimos escopeteados como si no hubiera un mañana (algo comprensible con las maravillosas playas que tenemos en Galicia); es buen momento para entender que el sol es bueno para la salud, pero también que puede ser muy malo. Y por lo tanto es recomendable dar una serie de avisos al respecto.


Lo primero de todo es que aún no hace mucho calor, que estamos en primavera y se está bien a una temperatura bastante agradable, pero de vez en cuando viene ese airecito propio de las tierras de Invernalia, mientras que otras veces el aire que llega parece surgir de lo más profundo del Orodruin, y se nos pueden acercar un par de Hobbits a pedir direcciones para quemar un anillo. Así que puede que nos confiemos un poco de más y asumamos (erróneamente) que este sol "no quema".


¿El Sol Quema? ¿En serio?

Y si, el sol quema... siempre quema. Puede que parezca que no. Hay horas en las que quema menos y horas en las que quema más. Pero SIEMPRE quema. Esa es una de esas verdades que hay que grabarse a fuego en el cuerpo. Y por eso, las protecciones solares son siempre tan importantes. Podremos usar más protección o menos, mayor índice o menor, en crema o gel, en barra o emulsión, pedátrico o adulto... pero es importante que se use. Ya sean pieles más delicadas o más duras, más suaves o más ásperas, más claras o más oscuras (sobre este tema no entraré desde aquí, ya que para esto prefiero que os acerquéis a la farmacia y ya le dedicamos el tiempo que sea necesario para ver el tipo de piel, y qué fotoprotector sería el más aconsejado a un nivel individual) solo decir que usar una protección apropiada y en cantidad y pauta correcta nos va a salvar de muchos problemas futuros (y presentes... que las quemaduras por exposición directa al sol no son tan raras como se pueda pensar). La vitamina D es importante en el cuerpo. Y más ahora después del invierno y de estos tiempos en los que salir se nos hacía complicado. Y la exposición al sol es imprescindible para generar un buen nivel de esta vitamina.


Pero no podemos usar esto para salir sin protección. Que una cosa no quita la otra. Y ponerse protección de forma correcta no impide que el cuerpo genere su buena cantidad de vitamina D.


Así que ya sabéis. No nos confiemos pensando que el verano aún no ha llegado. La protección de la piel es importante. Y cuidarla después también. Y ahora sí que sí... a disfrutar del sol, que buena falta nos hace a todos.


Que bien sienta vaguear al sol



18 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo
bottom of page